PELIGRO DE INCENDIO

No son nuevas las quejas de los bomberos de la Comunidad de Madrid. No son nuevas las denuncias de falta de efectivos. No son nuevas las protestas por el trato que reciben por parte de Esperanza Aguirre y por la Consejera Regina Plañiol. Pero sobre todo no son nuevas las advertencias del enorme riesgo que está corriendo la población madrileña aunque ahora se acentúe por la época del año en la que nos encontramos.

Nada de ésto es nuevo, o por lo menos no lo es para mí, y sin embargo aún tengo los pelos de punta un día después de la visita al parque de bomberos de Arganda del Rey junto con el Secretario General del PSM, Tomás Gómez, y otros compañeros de la Agrupación Socialista de Arganda con su Secretaria General a la cabeza. Y digo que aún tengo los pelos como escarpias porque hasta ayer por la mañana no era consciente de la gravedad del riesgo al que estamos expuestos los madrileños y porque hasta ayer por la mañana no había vivido en primera persona el estilo caciquil de Esperanza Aguirre y sus secuaces.

Lo primero que nos dijeron los bomberos al sentarnos con ellos es que son conscientes de la situación precaria en la que se encuentran las arcas de este país y especialmente las de la Comunidad de Madrid, sin un puto duro, utilizando las palabras que usó la Presidenta en su momento. Son conscientes y por ello no aspiran, en este momento, a una situación idílica, con parques bien distribuidos geográficamente y con los efectivos necesarios para dar un servicio de calidad. Lo que reivindican es poder trabajar en unas condiciones mínimas de seguridad; de seguridad para ellos, pero sobre todo de seguridad para los ciudadanos. Lo comentaba Tomás Gómez en la comparecencia ante los medios de comunicación tras la visita, en tan sólo 5 años se ha pasado de una plantilla que rondaba los 1.500 efectivos a una que apenas supera los 1.000.

Están utilizando con el servicio de bomberos la misma estrategia ruin que han usado, con bastante buen resultado por cierto, con los profesionales de la educación y de la sanidad. Desprestigiarles acusándoles de vagos y derrochadores, "demostrando" que con menos personal se puede dar un mejor servicio y además ahorrarle dinero al maltrecho bolsillo del contribuyente. Vilipendiar a un colectivo que cuenta con la simpatía y el reconocimiento de la ciudadanía con el objetivo final de hacer negocio, como siempre pasa con los liberales y sus insaciables empresarios de cabecera.

Basten dos datos y un caso real vivido esa misma mañana  para calibrar el riesgo de tener al frente de las instituciones al Partido Popular:

• El parque de bomberos de Arganda da servicio a 23 municipios y la Comunidad de Madrid es incapaz de garantizar al menos 10 efectivos por turno que es el mínimo exigible, que no recomendable.
• El parque de bomberos de Arganda da servicio a una superficie tan extensa que en algunos casos tardan entre 45 y 50 minutos en poder acudir a un aviso, teniendo que aguantar la ira y los insultos de los vecinos por la tardanza. Nos decía un bombero que los insultos no eran lo peor, que él lo que peor llevaba era pararse los 45 minutos pensando en que no llegaría a tiempo de salvar la vida de los afectados.
• Ayer por la mañana el parque de bomberos de Arganda se quedó vacío porque tuvieron que acudir a una alarma de una nave que se había incendiado días atrás. Minutos después un vehículo se incendiaba en el kilómetro cuarenta y pico de la A3, y como en Arganda sólo quedaba el emisorista, tuvieron que acudir los bomberos de Coslada, teniendo que cerrar dicho parque durante la intervención. Es decir, por una falsa alarma y por un coche incendiado, Rivas (70.000 hab.), Arganda (54.000 hab.) y Coslada (92.000 hab.) se quedaron sin un sólo bombero. Imaginen ustedes qué hubiera pasado si durante este periodo de tiempo hubiera habido un gran incendio o un incendio en el que personas estuviesen en peligro y la inmediatez de la intervención hubiese sido vital.

Pueden ustedes pensar que estoy haciendo un ejercicio exagerado de imaginación y que me he puesto tremendista. Es exactamente lo que dijo Pilar Hernán Martín, Jefa del Cuerpo de Bomberos de la Comunidad de Madrid, cuando ha llegado a intentar boicotear la reunión coartando a los funcionarios que se encontraban reunidos con nosotros. Les voy a contestar los mismo que los bomberos le contestaron a ella: ¿Por qué siempre olvidáis que el Cuerpo de Bomberos es un servicio PÚBLICO, de PREVENCIÓN y extinción de incendios?

No quiero extenderme demasiado pero lo que nos contaron nuestros bomberos da para mucho; y como además quiero contarles como finalizó la visita y como nos trató la responsable de prensa enviada por Esperanza Aguirre, ya les advierto que habrá segunda parte.