Es curioso el fenómeno de la memoria. Puedo recordar perfectamente el día en que nació mi hermano pequeño pese a contar apenas con tres años. Recuerdo los nombres, Isabel, Aitor y José Manuel, de mis primeros compañeros de pupitre allá por el año 79 del siglo pasado. Sin embargo no soy capaz de recordar el password con el que me di de alta en Instagram hace tres semanas ni el nombre del camarero que me sirve el café cada mañana desde hace más de cuatro años y al que por ende tengo que llamar 'perdona'.
La memoria surge como resultado de conexiones sinápticas repetitivas entre las neuronas. Según su alcance, la memoria se puede clasificar en memoria a corto plazo, consecuencia de la simple excitación de la sinápsis para reforzarla o sensibilizarla transitoriamente, y memoria a medio y a largo plazo, consecuencia de un reforzamiento permanente de la sinápsis gracias a la actuación de ciertos genes y a la síntesis de las proteínas correspondientes.
El cerebro humano de un individuo adulto estándar contiene unos 100.000 millones de neuronas y unos 100 billones de interconexiones entre ellas. Sin embargo, si este cerebro humano de individuo adulto estándar pertenece a un dirigente del Partido Popular y se le estimula con las palabras Bárcenas, sobresueldos y financiación irregular, las uniones entre dendritas y axones comienzan a debilitarse y los 100 billones de sinápsis neuronales se quedan en un puñado de docenas, lo que obliga a este individuo adulto estándar dirigente del PP a balbucear frases sencillas como 'No me consta' o 'No recuerdo'.
Estos individuos adultos dirigentes del Partido Popular (vamos a obviar lo de estándar por no ofender al resto de la especie Homo sapiens) que recuerdan cada €uro que malgastó Zapatero, que recuerdan con precisión cada una de las fechas en las que en España se ha subido el IVA con excepción del 1 de septiembre de 2012 y que se saben de memoria los teléfonos móviles y los correos electrónicos de cada uno de los Presidentes de las empresas del Ibex 35, no son capaces de recordar si alguna vez recibieron algún tipo de gratificación que no constara en su nómina, no recuerdan si mientras gobernaban, por casualidad, coincidían donaciones empresariales no declaradas con adjudicaciones públicas, y mucho menos recuerdan el día en que Bárcenas les envió el típico e-mail de despedida cuando se abandona una empresa. Si me apuran, creo que no son capaces de recordar si Bárcenas fue Tesorero y Gerente del Partido Popular o de la Plataforma Vecinal Independiente de Peleas de Abajo.
Según fuentes médicas, la pérdida de memoria puede deberse a enfermedades físicas como el alzheimer o la meningitis, a lesiones cerebrales producidas por un traumatismo, a enfermedades psíquicas como el estrés o la depresión, al consumo excesivo de alcohol, al envejecimiento o a la cara de cemento.
No hace falta ser un lince para adivinar cual de todas estas causas no proviene de una fuente médica pero que es la que con toda probabilidad ha provocado la amnesia ante el juez de Francisco Álvarez Cascos, a Javier Arenas y a María Dolores de Cospedal.
Estos tienen memoria selectiva, o como diría mi padre, solo se acuerdan de lo que les da la gana...
ResponderEliminarEn el PP, tienen una memoria selectiva. Tenían un programa oculto desde hace muchos años, sobre las privatizaciones y ahora las están llevando a la práctica.
ResponderEliminarSale el caso de la financiación ilegal,¡¡ lo llevan practicando desde su fundación, cuando AP pasó a ser el PP. y no hay nadie en el PP de los que mandan, como Rajoy,que recuerde nada de nada, delante del juez Ruz. Esto es la memoria selectiva del PP!!
Un saludo cordial.
Q bueno!!! Yo tb tengo muy mala memoria, xo te aseguro q recuerdo perfectamente cndo me ingresan dinerillos extra... ¿Será q xa estos Homos es algo tan habitual q lo borran de la memoria?
ResponderEliminarLa culpa la tiene Will Smith, que ha visitado Génova con el desmemorizador ese que utilizaba en Men in black
Eliminar