He andado muchos caminos,
he abierto muchas veredas,
he navegado en cien mares
y atracado en cien riberas.
Así comenzaba Antonio Machado el poema, que después musicara Serrat, en el que describía a la diversidad de gente que se había ido encontrando a lo largo de su vida.
Yo apenas puedo contar una docena de años de vida laboral que sumar a mi etapa como estudiante, pero por distintas circunstancias, he tenido la suerte de residir en distintas ciudades de distintas comunidades autónomas, y al igual que Machado, en cada una de esas ciudades, en cada una de las etapas que he vivido, me he encontrado con gente de todo tipo: rumanos, vascos, argentinos, canarios, peruanos, catalanes, uruguayos, murcianos, búlgaros, gallegos...; fontaneros, dependientes, ingenieros, arquitectos, electricistas, abogados,...; católicos, musulmanes, judíos, ateos,...; gente sin estudios, licenciados, ingenieros, FPs, masters en ESADE,...; conservadores, progresistas, comunistas, apolíticos,...
Gente que tiene más o menos que ver con mis ideas, con mis creencias, con mi forma de vida, pero con la que he compartido trabajo, reuniones, discusiones, cañas, salas de espera, vagones de metro, etc. En mi currículum destaco que soy una persona asertiva y empática, entre otras cosas, porque creo que he sabido relacionarme con cada uno de ellos con total normalidad, sin sentirme superior ni inferior, y los he tratado a todos con el mismo respeto.
Por eso, cuando observo a individuos que te miran por encima del hombro, que tratan con desprecio a subordinados y a asistentas, a los que les repugna un bar de polígono, que creen que por tener un máster y un BMW son mejores y que piensan que es común ganar 100.000€ al año, doy gracias por haber tenido la suerte de ser una persona "normal".
Pero sin embargo no es cuestión de suerte, la diversidad de personas que día a día me encuentro ya estaban conmigo desde niño en la escuela, pero eso sí, en la escuela pública, la única que no segrega por sexo, raza, nacionalidad o condición social.
Es muy grave el acoso que se está haciendo desde el Gobierno de la Comunidad de Madrid a la educación pública y a sus profesionales. Un ataque que empeora día a día la calidad de la misma por la constante y dramática reducción de recursos. Un continuo palo en las ruedas en el acceso a las plazas públicas, ya que estas crecen a un ritmo infinitamente inferior al incremento de alumnos. No hay suficientes escuelas infantiles y para colmo ahora planean cobrar por la educación secundaria.
Escucharéis que es porque no hay dinero, que una plaza en un colegio público cuesta tres veces más que una en un centro concertado, que los madrileños preferimos los colegios concertados, etc., etc., etc.
Aunque alguna de estas razones fuera cierta, que no lo son, no debemos y no podemos pensar en la educación de nuestros hijos en términos de gasto. La escuela pública es, sobre todo, el primer y más importante elemento integrador de nuestra sociedad, donde todos pueden entrar en igualdad de condiciones y salir con las mismas posibilidades de éxito en la vida, y eso como dice el anuncio, no tiene precio.
Buenas tardes
ResponderEliminarEstoy de acuerdo con las conclusiones de tu post aunque creo que parten de premisas no del todo ciertas.
No considero que el sistema educativo esté peor que antes. Es claro que tiene mucho recorrido para mejorar, pero reconoceras que se ha avanzado mucho.
El presupuesto no deja d crecer, se ha asumido el gran incremento de alumnos d la última década, se ha extendido la gratuidad d 0-3 años...es cierto q se podrían hacer muchas mas cosas para mejorar otras tantas, pero de ahí a decir o propagar el final de la educación publica, como se intenta hacer ver estos dias en Madrid, va un abismo.
La falta de plazas que se menciona en el articulo es un mal que siempre se ha sufrido. Recuerdo que hace años eso era el problema principal en preescolar. Se ha trasladado de etapa educativa pero mas bien lo veo achacable a una falta de planificación.
En definitiva, creo que la educación, evidentemente, puede y debe mejorar pero no esta peor que el año pasado, ni se plantea pagar en etapas educativas ahora gratuitas, ni se han producido recortes de ningun tipo....
El modelo de gestión puede gustar mas o menos pero no es justo este ataque ante algo que no ha cambiado sustancialmente desde el año pasado.
Saludos
Redondenado las cifras, en 1999 el numero de centros publicos no universitarios en Madrid era de 1200 y el de privados de 800
ResponderEliminarDiez años despues, los privados son 1600 y los publicos 1500
Yo creo, que en estos 10 aos de gobierno del PP, claro que algo esta cambiando... a peor.